64, avenue d'Espagne, 64600 Anglet
A pocos minutos del aeropuerto de Biarritz y de las playas de la costa vasca, este hotel ofrece un entorno práctico y confortable para una estancia en Anglet. Su ubicación privilegiada permite acceder fácilmente a Biarritz, Bayona o incluso Saint-Jean-de-Luz, además de contar con un acceso rápido a las principales vías para explorar la región. Tanto si viaja por negocios como si está de vacaciones, todo está diseñado para facilitar su estancia.
Desde la llegada, la acogida es cálida y atenta. El equipo se esfuerza por ofrecer un servicio fluido y disponible a cualquier hora del día y de la noche. La recepción, abierta las 24 horas, permite una llegada sin preocupaciones, y los diferentes espacios del hotel están pensados para garantizar un confort óptimo.
Las habitaciones están decoradas en un estilo moderno y funcional. Climatizadas y insonorizadas, cuentan con la cama Sweet Bed by ibis, que ofrece un apoyo agradable para un descanso reparador. La presencia de un televisor de pantalla plana y conexión Wi-Fi gratuita asegura un momento de relajación, mientras que el baño privado, equipado con ducha y retrete, aporta lo esencial para una estancia sencilla. Algunas habitaciones están adaptadas para familias, con la posibilidad de disponer de una cama adicional para un niño.
Por la mañana, el desayuno buffet permite empezar bien el día. Se ofrece una selección de productos dulces y salados, con bollería fresca, frutas, yogures, huevos y bebidas calientes. Para las mañanas tempranas, hay disponible una opción más ligera a partir de las 4:00.
A cualquier hora, el bar de aperitivos permite disfrutar de un tentempié o compartir una bebida en un ambiente acogedor. Para una comida más completa, el restaurante del Novotel vecino ofrece una carta variada, con especialidades regionales y cocina de temporada. La terraza exterior constituye un espacio agradable para disfrutar de un momento al aire libre.
El hotel también dispone de un aparcamiento al aire libre, con una opción segura bajo videovigilancia. Tanto si viaja en coche particular, en autocar o en bicicleta, hay soluciones de estacionamiento previstas.
El entorno inmediato invita al descubrimiento. A pocos kilómetros, las playas de Anglet ofrecen un marco ideal para un paseo junto al mar, una sesión de surf o un momento de relax al sol. Biarritz y Bayona, cercanas, seducen por su encanto distintivo: la elegancia costera de una y la autenticidad vasca de la otra.
Para una salida cultural, el museo marítimo de Biarritz narra la historia de la ciudad y su vínculo con el océano. Los amantes de la gastronomía podrán, por su parte, descubrir los secretos del chocolate en el museo dedicado a él.
En cuanto a restaurantes, varias direcciones merecen una visita. En Biarritz, una parada en Txango permite degustar una cocina bistronómica inspirada en los sabores del suroeste. En Bayona, las Halles ofrecen una inmersión en las especialidades locales, entre jamón curado, pimiento de Espelette y queso de oveja. Para un momento de convivencia en torno a tapas, La Tantina de la Playa, en Anglet, propone una experiencia gastronómica con vistas al océano.
Tanto si está de visita para una estancia corta como para una escapada prolongada, este hotel constituye un punto de partida agradable para explorar la costa vasca y disfrutar de su arte de vivir único.
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